No cabe duda que la adopción de la nube ha sido rápida, tanto por parte de los usuarios como por parte de las empresas. Todos utilizamos a diario servicios de correo electrónico, redes sociales y de almacenamiento en la nube como un estándar.
También las empresas han descubierto que las soluciones en la nube aumentan su eficacia y les permiten ahorrar costes. Las aplicaciones en la nube, sobre todo las de comunicación, intercambio de archivos, software de oficina, copias de seguridad y almacenamiento, y gestión de clientes, han aumentado rápidamente entre las empresas de todos los tamaños.
Y no solo entre las pequeñas empresas, las grandes corporaciones hace tiempo que vieron el potencial de trasladar parte de su departamento de IT, ya sea la infraestructura o la gestión de la red, a la nube. Según todos los indicios, parece que, estemos o no preparados para ello, la tecnología de cloud computing está aquí para quedarse.
La pregunta obligada es, ¿hacia dónde se dirige la nube?
En este artículo examinamos las tendencias en el mundo del cloud computing y lo que les espera a los usuarios y las empresas en un futuro próximo.
Centrarse en la seguridad
La seguridad siempre ha sido una de las principales preocupaciones del sector del cloud computing, y lo seguirá siendo en el futuro a medida que aumente el número de usuarios que se suman a ella.
Así lo respaldan las diferentes técnicas y protocolos de seguridad más avanzados que aumenten el nivel general de privacidad y protección de la información almacenada en la nube.
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Enfoque híbrido
A pesar de lo que pueda parecer, las grandes empresas son las que más han tardado en sumarse al cloud computing. Después de todo, se enfrentan a más riesgos cuando se trata de lidiar con cuestiones como la seguridad, el cumplimiento, las interrupciones, los sistemas heredados, etc.
Sin embargo, tampoco pueden ignorar las ventajas de la nube. Para las grandes empresas que tienen importantes necesidades de IT, la escalabilidad, la agilidad del negocio y una implementación más rápida son los mayores atractivos a tener en cuenta.
Por ello, los analistas predicen que, a medida que estas empresas busquen aprovechar las ventajas de la nube y, al mismo tiempo, mantener el control sobre los datos y sistemas de misión crítica, el uso de un enfoque híbrido, es decir, poner algunos servicios en una nube pública y, al mismo tiempo, optar por utilizar una nube privada para otras aplicaciones, experimentará un enorme crecimiento en los próximos años.
Cloud computing móvil
La política empresarial BYOD o Bring Your Own Device (trae tu propio dispositivo) es otra tendencia emergente que no habría sido posible si no fuera por la tecnología en la nube.
Consiste en que sean los propios empleados los que lleven sus dispositivos móviles al trabajo, lo que les permite acceder a archivos, datos y aplicaciones de la empresa tanto dentro como fuera del lugar de trabajo.
Como ocurre con cualquier nueva práctica empresarial, el concepto de BYOD tiene ventajas y desventajas.
Por un lado, algunos creen que ayuda a aumentar la productividad de los empleados, al tiempo que reduce los costes generales de IT, que no deben desembolsar dispositivos nuevos cada cierto tiempo.
Por otro lado, la política BYOD también abre toda una serie de nuevos problemas relacionados con la seguridad.
Eficacia e innovación sin esperas
Aunque el ahorro de costes siempre ha sido una de las ventajas que los defensores de la nube se apresuran a señalar, su capacidad para mejorar y agilizar los procesos empresariales, aumentando así la eficiencia y la agilidad dentro de la organización, es otra de las oportunidades clave que ofrece la nube.
Es evidente cuando se echa un vistazo a los servicios en la nube más utilizados: copias de seguridad y archivos, continuidad del negocio, herramientas de colaboración y procesamiento de big data.
Además, la nube está facilitando la creación de nuevos productos y la creación de nuevas líneas de negocio. Con el acceso a una mayor capacidad informática a menor coste y a un ritmo de despliegue más rápido, las empresas pueden escalar hacia una mayor innovación sin tener que preocuparse por la disponibilidad de recursos informáticos.
Sostenibilidad
Los potentes motores y servidores de cloud computing, junto con los vastos espacios de almacenamiento digital, suponen un enorme consumo de energía.
No en vano, muchos grandes centros de computación en la nube están situados en países con un precio de electricidad barato como Argentina.
Y a pesar de que muchos productos que utilizan la computación en la nube como las criptomonedas afirman que son más verdes que nunca, la realidad es que la sostenibilidad y la huella medioambiental es un problema serio cuando hablamos de cloud computing.
Por eso, muchos profesionales y equipos han empezado a esforzarse por hacer más sostenibles las prácticas de cloud computing. Entre las medidas que se están implementando y que se implementarán en los próximos meses, está la reducción de la potencia de los servidores individuales, el desarrollo de sistemas de almacenamiento de alta tecnología o la minimización de las conexiones dentro de la red.
Computación sin servidor
Otra tendencia creciente de cloud computing es la computación sin servidor, donde los clientes solo pagan por lo que necesitan.
En el pasado, muchos proveedores utilizaban un modelo de precios en el que cobraban a cada cliente por una cantidad fija de servicios de back-end, como una capacidad determinada de ancho de banda y almacenamiento.
Ahora, más empresas de computación en la nube se están orientando hacia la computación sin servidor de pago por uso, en la que los clientes solo pagan por los recursos que acaban utilizando.
Este sistema no solo puede ayudar a los clientes a conseguir un precio competitivo, sino que también puede ayudar a los proveedores de la nube a asignar más eficazmente sus recursos a los distintos clientes.
Edge computing
Algunos proveedores de nube han comenzado a cambiar al edge computing: gracias a ella, los proveedores de la nube crean y dan soporte a varios centros de datos localizados cerca de los dispositivos que acceden a sus servicios, en lugar de una ubicación centralizada que podría estar a cientos de kilómetros.
La popularidad del edge computing ha aumentado en parte debido a la creciente demanda de poblaciones en entornos rurales de tener acceso a internet.
También es una tendencia al alza en cloud computing, ya que puede permitir tecnologías que se ejecutan en Internet de las Cosas (IoT), como los sistemas de control de la temperatura.
Optimización y automatización cloud
Las empresas pueden incorporar cada vez más la automatización y optimización de la nube en sus operaciones.
La automatización se refiere a las tareas repetitivas que una nube puede realizar por sí misma sin intervención humana. Con la optimización, las organizaciones se aseguran de que el proveedor de la nube puede coordinar estas tareas automatizadas e integrarlas en un flujo de trabajo cohesionado.
El desarrollo de procesos de automatización y optimización de la nube puede ayudar a las organizaciones a gestionar con éxito la prestación de una serie de servicios a sus clientes.
Data fabric
Data Fabric ofrece una infraestructura de gestión de datos distribuida de forma flexible.
Así, los profesionales pueden acceder fácilmente a los datos a través de diversos medios, como in situ o a través de dispositivos de punto final, independientemente de dónde estén almacenados los datos dentro del sistema.
Algunos proveedores de la nube están migrando hacia este tipo de arquitectura de gestión de datos para poder ofrecer un acceso más fiable a los datos a un mayor número de usuarios. El tejido de datos también puede ayudar a las empresas a automatizar sus diversos procesos de análisis.
Multi-clouds
Cuando una organización opera mediante multi-cloud, significa que utiliza simultáneamente una o más nubes públicas de diferentes proveedores.
Algunos clientes pueden simplemente operar en multi-cloud por su cuenta, mientras que otros pueden agrupados por dos organizaciones. Las empresas que ofrecen este tipo de servicios multi-cloud preempaquetados pueden ayudar a los clientes a reducir sus casos de redundancia de datos y mejorar su eficiencia operativa.
Containers
Otra tendencia creciente de cloud computing es el uso de containers, que se refiere a un medio portátil de desplegar y ejecutar una carga de trabajo en varias nubes.
Cuando utilizas un container, esencialmente proporcionas a esa carga de trabajo la capacidad de ejecutarse como su propio sistema operativo. Algunos expertos esperan que los containers aumenten su popularidad debido a la creciente demanda de servicios híbridos y multi-cloud.
Aplicaciones nativas de la nube
Los proveedores de la nube que prestan servicio a las empresas de desarrollo de software pueden considerar unirse a la tendencia de utilizar más aplicaciones nativas de la nube. Algunas empresas han comenzado a transferir sus “planes de recuperación de desastres a la nube”. Otra tendencia creciente en la computación en nube es la de los escritorios virtuales. Prácticamente todo el mundo, tanto las empresas, como los profesionales de IT y los proveedores de servicios en la nube, tratan de reducir sus gastos operativos. Algunos profesionales prevén un aumento de la demanda de plataformas como servicio (PaaS). Se debe principalmente a que las PaaS pueden gestionar funciones de nube privada y pública, lo que las convierte en una buena plataforma para nubes múltiples y nubes híbridas. PaaS también funciona bien cuando soporta containers y tecnologías nativas de la nube. Cada vez se hace más necesaria la “descentralización de ciertos servicios de IT”, entre ellos, el de cloud computing. Se abaratan los costes, se evita la necesidad de contratar talento a un precio alto y se cuenta con un servicio de calidad a un precio competitivo.
Las tecnologías nativas de la nube funcionan como una red de containers y microservicios distribuidos, lo que puede reducir el posible tiempo de inactividad y mejorar los procesos automatizados. Al adoptar aplicaciones nativas en la nube, los proveedores de la nube pueden ayudar a los desarrolladores de software a construir y lanzar sus productos más rápidamente.
Así, ayudan a reducir sus costes de ciberseguridad, adaptarse más fácilmente a las capacidades de teletrabajo y reajustar sus planes de recuperación de desastres según sea necesario sin alterar su propia arquitectura de IT.
Los proveedores pueden ayudar a estas empresas en la transición a la recuperación de desastres basada en la nube a través de una serie de medios, como por ejemplo ofreciendo la “servicios de backups como servicio (BaaS) “.
Escritorios virtuales
Son representaciones visuales de las aplicaciones y los sistemas operativos que están separados de los dispositivos físicos, como ordenadores portátiles o teléfonos inteligentes, que podrían acceder a ellos.
Con un escritorio virtual en la nube, los usuarios finales pueden acceder a todas sus aplicaciones y funciones del sistema operativo, independientemente de su ubicación o hardware.
Control del gasto
A medida que la demanda de servicios de cloud computing crece, también lo han hecho algunos gastos generales. A los profesionales del sector les puede resultar útil elaborar estrategias y poner en práctica nuevas formas de reducir gastos, como por ejemplo consolidando sus servicios o creando una infraestructura más racional.
PaaS
Proveedores colaboradores
En los próximos meses y años veremos cada vez más cómo las empresas externalizan sus servicios de IT para aprovechar todas sus ventas. Por parte de los proveedores, como Semantic Systems, eso supone la necesidad de centrarse en crear relaciones de confianza con las empresas y hacer hincapié en la creación de servicios cohesivos y seguros para sus clientes.
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