A pesar de ser un tema conocido por casi todos, la definición de blockchain es esquiva a los no iniciados en tecnologías. ¿Cómo lo definirías si tuvieras que explicárselo a alguien sin conocimientos técnicos?
Podríamos empezar por lo que no es. Es decir, blockchain no es una base de datos. O no solo. Es una colección de herramientas que permiten la transmisión de un bien o recurso de un lugar a otro sin la necesidad de una tercera persona como parte del proceso.
En este sentido, la tecnología ‘blockchain’ propone un nuevo modelo de seguridad, pues la autenticidad no está garantizada por un tercero sino por una red de nodos (ordenadores conectados a la red) que participa en “cadenas de bloques” o blockchain.
Es decir, cualquier intercambio de bienes o servicios debe ser acordado y almacenado de manera clara sin la necesidad de un tercero para que se lleve a cabo.
Pero volvamos al principio. Este artículo resume los conceptos más importantes para entender la tecnología blockchain: te contamos qué es, cómo funciona y algunos casos de uso.
Qué NO es blockchain
Antes de describir la tecnología blockchain, empezaremos aclarando lo que NO es. Mucha gente malinterpreta términos y conceptos, lo que lleva a pensar en conceptos erróneos, por ejemplo:
- No se trata de una criptomoneda.
- Tampoco es un lenguaje de programación.
- No se trata de una tecnología de inteligencia artificial.
- Tampoco es un framework de Python.
Si pensabas que alguna de estas opciones era correcta, no te preocupes, enseguida entenderás por qué no son verdaderas.
¿Qué es blockchain?
Una de las mejores definiciones de blockchain es la proporcionada por Don y Alex Tapscott, que la describen como “un libro de contabilidad digital incorruptible, de transacciones que puede programarse para registrar no solo transacciones financieras, sino prácticamente todo lo que tenga valor”.
Blockchain es el nombre de una nueva tecnología. Se trata de una secuencia de bloques o grupos de transacciones encadenadas y distribuidas entre los usuarios.
En última instancia, la cadena de bloques actúa como un registro permanente de operaciones que no necesita la autorización de una entidad externa para confirmar la veracidad y la integridad de los datos. Estas transacciones suelen ser financieras, pero también se pueden almacenar otros tipos de información en los bloques.
¿Qué aplicaciones tiene? Desde operaciones financieras hasta procesos electorales
Los procesos de las distintas industrias están cambiando gracias a la tecnología blockchain: no solo en los sectores científicos o económicos, sino también en la logística o los órganos gubernamentales. Existen incluso plataformas que rastrean el curso de la cadena de suministro de productos alimenticios, desde que sale del campo hasta que llega a nuestro hogar.
En el caso de los gobiernos, algunos han optado por seguir los procesos electorales a través de la tecnología blockchain, y eliminan así los errores de los sistemas de auditoría que se utilizan en la actualidad.
Un ejemplo en España es el caso de Almócita, la primera comunidad energética ubicada en un municipio de la Alpujarra almeriense, con unos 200 habitantes.
La idea del proyecto es generar energía fotovoltaica para impulsar la productividad de esta zona. La propuesta prevé contar con 60 kW fotovoltaicos más 22 kWh de almacenamiento en baterías. Para este proyecto, el blockchain calculará el momento correcto para vender los excedentes y negociar de manera segura la energía renovable que se haya generado.
Hash criptográfico: qué es y cómo funciona
Un hash es un procedimiento diseñado para convertir datos entrantes en una serie de números de tamaño establecido, con el objetivo de asegurar la seguridad de la información. Cada entrada de la función hash producirá una salida diferente, y el resultado es fijo. Es decir, si se utiliza la misma entrada, el valor de salida será siempre el mismo.
Las funciones hash son una herramienta única en la cual el resultado de una entrada específica siempre será el mismo.
Estas funciones no se pueden invertir para obtener los datos originales. Existen varios algoritmos para producir diferentes resultados, y es imposible anticipar cómo afectará un cambio de entrada a la salida.
La tecnología blockchain usa estas funciones para crear un identificador único para cada bloque de transacciones, también incluyendo el valor hash del bloque anterior.
Los procedimientos informáticos existen para generar diversas formas de cifrado de datos. Cada vez que se ingresa una entrada al algoritmo, el resultado es completamente impredecible e imposible de predecir cómo los cambios en la entrada afectarán el resultado.
Los nodos de la cadena de bloques emplean funciones Hash para producir una etiqueta única para cada conjunto de transacciones. Además, cada bloque contiene el valor hash del bloque previo.
El ledger: un libro mayor inalterable
En la contabilidad tradicional, un libro mayor es un registro contable detallado de cada operación de una entidad, de manera que pueda llevar el control total de sus operaciones.
En el mundo de las criptomonedas, un ledger permite hacer lo mismo: cada transacción u operación queda registrada. Como consecuencia, las operaciones pueden ser auditadas de forma pública. Es decir que el ledger es el resultado de reunir y organizar la información de cada bloque de blockchain en dicha criptomoneda.
El funcionamiento del ledger está estrechamente relacionado con la característica anterior (hash). Los bloques de la cadena de bloques están vinculados entre sí por el hash del bloque anterior, lo que significa que no se puede modificar ningún bloque sin cambiar la cadena entera.
Por consiguiente, como se había mencionado antes, la cadena de bloques actúa como un registro contable digital inalterable.
Si una persona no identificada intenta alterar cualquier registro en el primer bloque, el código de seguridad generado a partir de este será modificado. El contenido del bloque 2 incluye HASH#1, lo que significa que HASH#2 también experimentará un cambio. Como resultado, los errores afectarán a todos los bloques posteriores en la cadena. El usuario declarará entonces inválida la cadena.
¿Qué papel juega la red Peer to Peer (P2P)?
Bitcoin, la criptomoneda líder, fue en sus inicios un sistema de moneda electrónica P2P. Bitcoin puede transferirse de una persona a otra a través de una red P2P, utilizando la tecnología blockchain. Enseguida te explicamos brevemente en qué consiste.
Un servicio peer-to-peer (P2P) es una plataforma descentralizada en la que dos personas interactúan directamente, sin intermediarios.
Como ya hemos visto, el papel de blockchain es actuar como un libro mayor distribuido. La estructura peer-to-peer de blockchain hace posible que todas las criptomonedas se transfieran en todo el mundo, sin la necesidad de servidores centrales (intermediarios).
¿Cómo es posible? Porque el disco duro de cada usuario tiene una copia de la cadena de bloques y la verifica con el disco duro de sus pares para garantizar que la información sea precisa. En caso de cualquier inexactitud o actividad maliciosa, la red rechaza rápidamente la transacción.
Protocolo de consenso
Hasta aquí hemos visto cómo se construye una cadena de bloques, pero no hemos visto cómo se valida esa cadena. En la tecnología blockchain, los usuarios han de llegar a un acuerdo sobre la validez de la cadena antes de añadir más bloques.
Los usuarios tienen que confirmar cada nueva entrada al registro mediante una serie de pasos establecidos previamente para garantizar la autenticidad de la información contenida. Los miembros de una red de blockchain son capaces de comprobar la autenticidad de un nuevo bloque usando diversas pruebas de seguridad, con el fin de asegurar que se alcance un acuerdo general.
Los nodos verifican si cada bloque cumple los estándares de la prueba, asegurándose de que todas las transacciones sean válidas. Si el bloque es aceptado, se agrega a la Blockchain y se continúa con la adición de nuevos bloques. Si hay varias cadenas válidas, se elige la más larga como la Blockchain principal.
Si hay varias cadenas de bloques válidas, los usuarios optarán por el camino más largo y descartarán el más corto para que se convierta en el Blockchain oficial.
El uso de blockchain en España
Un estudio de Cotec muestra que las pymes de España son pioneras en la adopción de la tecnología blockchain.
- Un gran porcentaje de compañías están dedicando una parte significativa de sus recursos al desarrollo de investigación y desarrollo.
- El 60% de las microempresas ha invertido más del 50% en este tipo de tecnología.
- El 69% de los encuestados considera blockchain como prioritaria en su estrategia, pero solo el 23% lo reconoce como fundamental en su actividad.
- En cuanto a las funcionalidades: el 22% es para registro, el 17% para tokenización y el 27% para trazabilidad.
El estudio arroja que un 97% de las organizaciones de tecnología considera posible utilizar blockchain en su empresa y un 65% de ellas ya tiene proyectos en desarrollo.
Por otra parte, la mayoría de las organizaciones utilizan la tecnología blockchain en innovación y nuevos modelos de negocio y, en menor escala, para optimizar los procesos que ya están en marcha.
Conclusión
Las cifras avalan que la tecnología blockchain está lo suficientemente consolidada como para acelerar muchos sectores clave en la economía, como los pagos electrónicos, la ciberseguridad o el control de la identidad, por mencionar solo algunos.
Esta evolución rápida hace necesario que las empresas cuenten con esta tecnología como parte de sus modelos de negocio o como complemento a sus operaciones, que les permitirán avanzar hacia un desarrollo más eficiente.
